Las primeras formas de lámpara eran palos ardiendo o recipientes llenos de brasas, 50.000 a. C. Luego se utilizaron antorchas formadas por haces de ramas o astillas de madera resinosa, atados y empapados en sebo o aceite para mejorar sus cualidades de combustión La lámpara de aceite eran recipientes de líquido oleoso que se hacían arder por medio de una mecha.
