¿Hay adictos a dormir?
Más que adicción, algunas personas padecen una facilidad excesiva para dormirse durante el día. Se llama hipersomnia, y puede ser primaria, cuando constituye un trastorno en sí mismo; o secundaria, cuando está producida por el consumo de fármacos o por diversas enfermedades, como dolencias respiratorias, procesos infecciosos, encefalopatías…
Por lo demás, el mínimo que debe dormir una persona está entre cuatro o cinco horas -lo que se llama sueño nuclear-, y luego está el opcional, que es el resto de horas que duerme cada uno y que da la sensación de descanso.