En Maba, un yacimiento de la provincia china de Guangdong, un equipo de paleontólogos encontró hace algunas décadas un cráneo humano agujereado que data de hace 126.000 años y que posiblemente es una de las evidencias de pelea más antiguas. Los análisis recientes de estos restos óseos revelaron que la herida se produjo por un golpe fuerte en la parte frontal derecha.

Según Lynne Schepartz, de la Universidad del Witwatersrand (Sudáfrica), y sus colegas, el hallazgo constituye una muestra de cómo los humanos de la Edad de Hielo se peleaban y posiblemente sea «el ejemplo más antiguo de agresión documentada en nuestra especie».

Además, prueba los seres humanos se ayudaban y sobrevivían a traumas. «El herido de Maba tuvo que necesitar ayuda de su grupo social, y eso quiere decir que alguien tuvo que cuidarle y proporcionarle comida hasta que se curó su herida», indicó Schepartz, que ha dado a conocer sus conclusiones en la revista PNAS.